jueves, 1 de diciembre de 2016

Carta de la web

La rehala, simplemente imprescindible.


Rehala,  según la RAE, jauría o agrupación de perros de caza mayor, cuyo número oscila entre 14 y 24. 

Sin declinar esta definición, que por intelectuales ha sido desarrollada, sería de pecado inmerecido quedarse con la mera explicación, no ahondando en la meritoria y a la vez desvalorizada actividad que la rehala desempeña.


En ocasiones, el cazador de sombrero se jacta de alguna de las no correctas intervenciones que una rehala ha profesado en el monte, "qué perros más malos", "el perrero iba por la vereda", "aquí no han llegado"... un largo sinfín de calumnias que en ocasiones tienen una justificación más allá de la propia percepción del montero, siendo más que elocuente alguno de los puntos que soslayamos, intentando refrescar la memoria a aquellos que no son conscientes de la infausta tarea que posibilita el disfrute de esta pasión. 

Con el debido núcleo zoológico en mano, cartilla sanitaria incluyendo vacunación  y microchip, certificado del registro de Actividades Económico-Pecuarias de la Dirección General de Medio Ambiente, libro de Registro de la agrupación, registro del vehículo que transporta a los animales en el Servicio de Ganadería y Protección Animal, son algunos de los apellidos a tan laboriosa burocracia. Ni que decir queda del mantenimiento, alimentación, limpieza, cuidados, instalaciones y demás, que persisten de modo anual.

Dicho lo dicho, que no es poco, ni todo, www.territoriocinegetico.com quiere valorar el trabajo altruista que estos devotos de los canes de caza, nos permiten disfrutar de nuestra afición, supeditada a su encomiable labor, simplemente imprescindible.



Manu.V