miércoles, 13 de diciembre de 2017

La picada

Actualidad de la pesca deportiva con la visión de Madrid Fishing.

(Sección de pesca)

Ángel Delgado, de Madrid Fishing, nos reporta una excelente y real visión del estado actual de la pesca deportiva, modalidades, normativas y especies.

La pesca siempre ha sido una actividad difícil de desarrollar por la cantidad de variables que se manejan a la hora de programar una salida. Hay que tener mucha afición para no tirar la toalla y apuntarse a clases de padel, y mucho más en estos momentos en los que la administración nos ha vuelto la espalda desde la aplicación de la Ley 42/2007 que limita y condena la pesca de algunas especies que eran el objetivo de muchos de nosotros. Algunas de ellas siguen ahí y siempre seguirán, le pese a quien le pese. Pero otras, como la trucha arco iris, han desaparecido de nuestros lagos y ríos, no volverán, salvo que se redacte una nueva ley de biodiversidad más realista y consensuada. La desaparición de esta especie ha terminado en apenas unos meses con las ilusiones de infinidad de asociaciones de pescadores que gestionaban algunos lagos y ríos de España, y que eran el destino de pesca de muchos aficionados. También ha llevado a engrosar las listas del paro con el personal de guardería que se ocupaba de la vigilancia y control de estos tramos, e indirectamente ha contribuido a aumentar el parón de los distintos sectores asociados a la pesca en estas zonas rurales, donde las posibilidades de negocio son tan limitadas.

Madrid Fishing colabora con algunas de estas asociaciones de pescadores en la Comunidad de Madrid y el ambiente que se respira es de desesperanza. Parece ser que la única solución es no hacer nada. Se ve que los pescadores somos un colectivo (47.000 licencias en esta Comunidad y 700.000 en toda España) que importa poco, con poco peso social, y en consecuencia, indigno de la atención de nuestra clase política.

Quiero también recalcar la importancia de una correcta política de gestión del agua y hacer un llamamiento a la administración en relación al desastre ecológico que supone para cuencas como la del Tajo, un uso abusivo de los trasvases, incumpliendo el mantenimiento de los caudales ecológicos, lo que significan la muerte de los ríos y de todos los seres vivos que habitan en ellos. Regar tomates en el levante español y exportarlos al mundo está muy bien para la balanza comercial de España, pero no a cualquier precio. El agua de los ríos es de todos y su reparto debe de ser coherente y sobre todo respetuoso con el medio ambiente.

Con todo, hemos seguido saliendo a pescar y vemos con ilusión que hay nuevos aficionados de corta edad que quieren aprender y que disfrutan cerca del agua con una caña en la mano, a pesar de los exiguos resultados.

También los más mayores descubren que están infectados con ese virus de la pesca que permanecía latente en su interior y que de repente se ha activado y les quita el sueño, planeando viajes a destinos exóticos en los que resulta imprescindible una caña en el equipaje.

Nuestras especies y técnicas favoritas esta temporada han sido:

- Los barbos a mosca en superficie desde embarcación, que es, bajo mi punto de vista, la forma más difícil y bonita de pescarlos, solo apta para pescadores avanzados que sean capaces de colocar sus imitaciones con precisión y rapidez a cierta distancia.

- Predadores (lucios, basses y luciopercas) con micro vinilos en montaje drop shot. Para pescadores pacientes a los que les guste pescar fino y registrar cada piedra, tronco o agujero que hay en el fondo del lago.

- Carp fishing con boiles y pellets. Quizás la más popular forma de pesca que podemos encontrar, por la abundancia de carpas en todos los lagos de la comunidad y por la relativa sencillez de esta técnica, en la que la mejor cualidad del pescador que la practica debe de ser la paciencia.

Pescando de esta manera es como hemos disfrutado de las mejores sensaciones y capturas sin renunciar por ello a fantásticas jornadas de bogas y carpas a mosca e incluso nos lo hemos pasado en grande engañando a las percasoles con pequeños vinilos.

No le hacemos ascos a nada y nuestros clientes tampoco. Solo esperamos que desde las distintas administraciones, se tengan en cuenta las sensibilidades de este colectivo de personas a la que le gusta disfrutar de la naturaleza en perfecta convivencia con el entorno y con el máximo respeto por los que más amamos: los ríos y lagos y los peces que viven en ellos.

Y como siempre “pescar y soltar”, no queda otra.