jueves, 4 de junio de 2020

El Consejo de Montse

Preparamos nuestro coto

Entre estado de alarma, confinamiento, fases…. sin darnos cuenta, estamos a las puertas de una nueva temporada cinegética.

En estas fechas, situados en todos los territorios en fase 1 y 2, ya hemos podido iniciar nuestros recechos tras el corzo, aunque se nos hace un poco extraño comenzar, ya con estas temperaturas veraniegas que nos obligarán a buscar al duende en las verdes praderas repletas de altas y tiernas hierbas donde abunde el agua.

Pero mi reflexión en este caso versará sobre los preparativos de nuestros cotos en vísperas de una nueva temporada de caza menor y mayor.

En primer lugar y relación a los acotados, es muy importante dedicar un tiempo a algunos aspectos que tienen gran importancia:

Señalización.

Debemos dar un paseo por el perímetro de nuestro coto para comprobar el estado de la señalización obligatoria y reponer todas aquellas señales de 1º y 2º orden que con el sol se van deteriorando. El buen estado de la señalización nos evitará problemas con los cotos colindantes, con algún intruso despistado y nos librará de alguna denuncia por parte del SEPRONA que en muchas ocasiones sólo ven esa tablilla doblada junto a una carretera.



Puntos de agua.

Es el momento de desbrozar y limpiar todos los manantiales o fuentes naturales que disponga el acotado, se aproximan fechas de mucho calor y especies como la perdiz con sus crías agradecen esos puntos de agua dispersados por el coto que les permitirán obtener el agua necesario y evitar concentrarse en un solo punto donde los depredadores oportunistas les estarán esperando.


Comederos.
La aportación suplementaria de alimento en estos momentos para las especies de caza menor la podemos prácticamente descartar, ahora el campo rebosa de alimento tanto de semillas como insectos, hierba etc. Pero deberemos preparar aquellos comederos que más adelante, pasado el verano, tomarán sobre todo las perdices.

En relación con el jabalí, si bien ahora disponen de comida por doquier, yo si soy partidaria de iniciar la aportación de comida en los comederos que tengamos por el coto donde acuden a diario las cochinas con sus crías y provocando unos hábitos rutinarios fijando sus encames próximos a estos comederos que probablemente, si tienen tranquilidad y agua, mantendrán durante el otoño-invierno.

Una última reflexión en cuanto a la caza menor. 

Estos días todos los aficionados hacemos algún comentario respecto al buen año que se presenta para la codorniz y menor en general por la abundante hierba en zanjas, linderos, monte, buenas cosechas de cereal, agua abundante…… pero estamos observando, al menos en mi zona, un cambio radical en el tipo de cultivo. No hace muchos años el cereal se segaba en su totalidad en julio-agosto, esto facilitaba protección y alimento para nuestras especies durante toda la primavera y verano. Ahora gran parte de este cereal se está segando en verde para forraje llenando nuestros campos de pacas blancas embolsadas, este tipo de recolección conlleva un desastre para parte de nuestras especies de menor como codornices, perdices y liebres pues gran parte de los nidos y crías desaparecen entre las fauces de las segadoras y empacadoras, probablemente la administración y los ecologistas tan implicados en algunos temas tendrían algo que decir.


Con la confianza de tener una buena temporada, saludos. 

Nos leemos en el siguiente post.

¡VIVA LA CAZA!


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