Canes, por Mª Ángeles Ayuso

EL GALGO ESPAÑOL

Se cree que el origen del galgo desciende el Antiguo Egipto, puesto que se pueden encontrar rasgos muy similares a los perros faraónicos que aparecen en pergaminos grabados hace más de 3000 años.

Desde la Edad Media esta raza se utiliza para la caza de conejos y liebres. Más tarde, con la entrada del galgo español al mundo de las carreras se cruzó con el lebrel inglés lo que ocasiono variaciones en la raza.

El galgo español es un perro atlético que necesita correr, con un instinto cazador muy desarrollado. Es un perro extremadamente ágil y veloz.

Suele ser una raza tímida pero muy sociable con otros perros. Son cariñosos y muy afables con las personas a las que les tiene confianza sobre todo son excelente para relacionarse con niños ya que son muy juguetones.

En cuanto a las características del galgo podemos decir, que tiene una cabeza alargada y proporcionada respecto al cuerpo, orejas semirrectas hacía atrás y con forma triangular, presenta una figura estilizada y musculosa, caja torácica amplia y vientre recogido.

Es robusto, ágil y bastante resistente, esbelto y elegante.

Cola larga y delgada, de inserción baja.

Si hablamos del color del galgo podemos decir que es una raza que acepta todos los colores ya que hay galgos canela, negros, verdugo, grises etc.

Su pelaje es corto, denso, fino y liso repartido uniformemente por todo su cuerpo.

Alcanza una altura de entre 60 - 70 cm, y un peso de entre 20 – 30 kg.

Al galgo español se le considera el perro más rápido del mundo, uno de los animales más veloces. Alcanza velocidades entre los 60 y los 69 km/h.

Galgos que estén metidos en competiciones, carreras etc. Necesitan muchos cuidados prioritariamente en sus patas y plantillas.

Mª Ángeles Ayuso Segovia para www.territoriocinegetico.com

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